31.8.11

El precio de sentirse libre era soportar varias horas de encierro.
Encierro es no tener nada especial que hacer y mucho que desear.

Libertad es lo opuesto.


Encieliberarte significa estar contigo porque tú así lo deseas, de tal manera que es un encierro libre, voluntario. La jaula no está hecha de metal, está hecha de confianza.

No hay más puerta que tu corazón.
No hay más llave que tus palabras.

- ¿Duermes conmigo?

2 comentarios:

Desidia dijo...

:3

Anónimo dijo...

guauuuu!!! que ganas tengo de decir eso a la cara